Una excursión sencilla pero bonita. Dejaremos los coches en la parte de arriba de la estación de esquí de Astún. Desde la señal de prohibido empieza el camino que en suave pero continua ascensión nos llevará hasta el ibón de Escalar.

El camino no presenta dificultad, aunque es un camino de montaña, esto quiere decir que es una senda pequeña y con pendiente. Con pocas señales, aunque no son necesarias. Subiremos un primer tramo hasta cruzarnos con el río que viene del Ibón, donde vemos la toma de agua de la estación 10-15 minutos desde el comienzo. Sin cruzar el río en ningún momento subiremos siempre por la derecha del mismo. Pasaremos por encima de la toma con el camino que está poco marcado a su derecha, para seguir ascendiendo durante un tramo junto al río.

Sin salirnos del camino, aunque tampoco hay alternativas, se irá suavizando la cuesta hasta que lleguemos a la pradera previa al Ibón de Escalar. A continuación veremos el hermoso ibón. En total entre 45 minutos y 1 hora, según nuestro ritmo, desde Astún.








Si queremos podemos ir llaneando al Ibón de Astún o de las Truchas. El camino que tomaremos sigue el que hemos venido: seguimos por ese camino bordeando el ibón, y cuando el camino gire a la izquierda, en dirección hacia el collado veremos un sendero mal marcado a nuestra derecha. Subimos el pequeño promontorio y nos encontraremos una amplia senda foresta de acceso a las pistas.

Siguiendola durante 20 minutos llegaremos al Ibón de las Truchas, cuando la pista forestal se divida en dos, una que sube al final del telesilla y otra que desciende. Iremos hacia el telesilla, y desde allí hemos llegado al Ibón.

Para regresar a Astún podemos seguir un tramo la pista forestal descendente y luego atajar por la pista de esquí, que aún deja entrever rastros del antiguo camino que llevaba al Ibón de Astún.